Tigre: cuando los Santos marchan, los falsos profetas tiemblan

En el marco de fortalecimiento de la educación pública, la comunidad educativa ungió a la  Escuela Secundaria N° 18 de El Talar con el nombre de “Barrio San Pablo”.

Al calor de un gobierno nacional que “destruye al Estado” con todo lo que éste tiene dentro, entre ello, la educación pública -escuelas y universidades-, la resistencia de la comunidad educativa, de gobiernos provinciales y municipales es el mejor dique de contención frente a tanta intolerancia, autoritarismo y violencia institucional con la que el gobierno del falso profeta invoca a las “fuerzas del cielo”. Frente a ese panorama, el municipio de Tigre, junto a la comunidad educativa, redobla la apuesta priorizando el bien común. En este caso invirtiendo y cuidando la educación pública.

Esto quedó nuevamente ratificado al momento en que el intendente Julio Zamora y la Secretaria de Desarrollo Social y Políticas de Inclusión, Gisela Zamora, junto a toda la comunidad educativa, participara del evento de imposición del nombre “Barrio San Pablo” a la ES N° 18 de El Talar.

Si "la educación es siempre un acto de esperanza que, desde el presente, mira hacia el futuro", es evidente que las inversiones en materia educativa realizada por provincia y municipio van en esta sintonía atendiendo las necesidades de una gran porción de la población que logra, gracias a la educación pública, escalar y mejorar la calidad de vida.

En diálogo con docentes y alumnos, el jefe comunal explicó que “el Municipio siempre está acompañando a los establecimientos educativos y a las instituciones que apuestan a la educación. Queremos un distrito próspero, de avance, con futuro, y para eso siempre es importante fortalecer la educación que es el primer eslabón que cambia y transforma a las comunidades. El Gobierno local no sólo hace programas educativos, sino también atiende la infraestructura de las escuelas y se abordan distintas situaciones”.

Por su parte, Gisela Zamora señaló que “junto al intendente nos hicimos presentes para acompañar a la comunidad educativa que hoy le puso nombre a este establecimiento educativo. Esto muestra la fuerte identidad de estos jóvenes, el orgullo de ser del barrio San Pablo y también refleja los valores de esta sociedad”.

En esta línea, la directora del establecimiento, Claudia Cisneros, destacó a la escuela como un espacio de acompañamiento para los vecinos y continuó: "antes los baños eran antiguos, de larga data y se renovaron en el 2020. Además, continuamente se realizan trabajos de parquización. Estoy muy agradecida al Municipio por el apoyo que nos brinda siempre”.

En tanto, Uriel Barrionuevo, alumno de sexto año, expresó: “Vi mucho crecimiento de la escuela en el último tiempo, todos los años los docentes se preparan de la mejor manera y la gente se esfuerza mucho por los estudiantes. Este espacio representa algo único para todos los vecinos y estar acá se siente muy especial”.