Milei no la ve, la gente, el comercio, las Pymes sí; Santiago “Billetera” Caputo también la ve

Datos oficiales y privados dan cuenta de una crisis socio-económica de las más relevantes de la historia, por las implicancias y daños institucionales que ocasiona.

Continuando con el falso relato que tanto beneficio le reportó, y le reporta, el autoritario, intolerante y agresivo presidente Milei dijo que “en el mundo se habla del milagro argentino”.  No conforme con semejante verbalidad, el primer mandatario aseguró que “todo el mundo ve el milagro menos los argentinos”, dicho esto durante la reciente reunión anual del Consejo de las Américas que reúne a los empresarios que más facturan en el país, esos que se caracterizan por la elusión y evasión fiscal que ha permitido que más de 400 mil millones de dólares se encuentren depositados en guaridas fiscales. Milei ve que “la economía comienza a dar claras señales de recuperación”, sin embargo, dice entender que haya economistas (liberales también) que “no quieran verla”.

La realidad le da un cachetazo terrible a un primer mandatario que destina entre 3 a 5 horas diarias para manifestarse en el ring de las redes sociales.

¿Qué datos concretos contradicen el relato oficial?

Por lo pronto, un 55% de pobreza -en 8 meses de gobierno de ultraderecha, la pobreza aumentó 11%, cifra nunca antes vista en la historia en un período tan corto-, 20% de indigencia y 1.5 millones de niños que se van a dormir sin comer.

La desocupación, que en diciembre de 2023 pisaba el 5,4%, hoy roza el 9%. La fila de desempleados en estos meses registró, siempre de acuerdo con datos oficiales, 190.000 personas sin trabajo.

A la fecha, 3.559 Pymes debieron cerrar sus puertas, siempre según datos oficiales, producto del modelo económico desplegado por el gobierno. Un panorama más caótico ofrece Industriales Pymes Argentinos (IPA) al referir que el cierre de industrias roza las 10.000.

Por otra parte, la industria manufacturera utilizó apenas el 54,5% de su capacidad instalada en junio, una cifra inferior a la de la crisis de 2002 y apenas 1,2 puntos porcentuales por encima del nivel que se verificó en la pandemia de Covid-19, con la actividad paralizada. En términos interanuales se verificó un derrumbe de 14,1 puntos. La capacidad industrial instalada en 2023 rondaba el 70%, en la actualidad 54,5%.

En materia de consumo, la realidad habla de una caída interanual del 16,1% en julio y un 9,6% en lo que va del año.

Por otra parte, el informe del IDAA (Instituto para el Desarrollo Agroindustrial Argentino) señala que el consumo de lácteos retrocedió 17,3% en toneladas y 14,4% en litros en el primer semestre del año frente al mismo período de 2023, por lo que advierten que si continúa con esta tendencia terminará el 2024 como el registro más bajo de la historia.

Paralelamente, otro dato que indica crisis severa proviene del pasaje en SUBTE: hay 5 millones de pasajeros menos que utilizan dicho transporte. El principal motivo, el valor del boleto y la pérdida de empleo.

La producción de automóviles en Argentina cayó un 9,8 % interanual en julio. Entre enero y julio, las exportaciones sumaron 155.169 vehículos, lo que supuso una caída del 14,1 % interanual.

Desde otro plano, económico, la Cámara Argentina de Comercio Electrónico (CACE) presentó días atrás su informe semestral que toma el período enero-junio de 2024. Los primeros seis meses del año estuvieron marcados por una baja general del consumo, en algunos sectores hasta del 30%, y si bien el comercio electrónico no estuvo ajeno a esta situación pudo sostenerse mejor que el segmento físico según los participantes del reporte.

Fernando Savore, vicepresidente de la Federación de Almaceneros de la provincia de Buenos Aires, expresó que “hace dos meses se nota que desde el día 15 de cada mes, los clientes comienzan a ajustar sus hábitos de compra y pago debido a la falta de dinero”.

Mientras esta pincelada pone de manifiesto una realidad contundente, irrefutable, el gobierno nacional, a través del asesor estrella y hombre de la mesa chica de los hermanos Milei, Santiago “Billetera” Caputo, logró que la SIDE tenga una partida secreta, que no merece rendir cuentas, de 100.000 millones de pesos.  Dinero que, no pocos entienden, estaría siendo destinado a alimentar y ensobrar a operadores mediáticos, a troles que alientan el relato oficial denostando a todos quienes se opongan.  Dinero que también podría ser utilizado para engrosar billeteras personales al igual que financiar campañas partidarias de la Libertad Avanza. 100 mil millones de gastos sin control gracias a una acción del gobierno que recibe el visto bueno de radicales, de la dirigencia del PRO, de peronistas “ensobrados” y de Hacemos Federal (Picheto), entre otros. Son, al igual que Santiago “Billetera Caputo, los que, al igual que Javier Milei, la ven.

Sacar al país del lugar al cual lo está llevando el actual gobierno -que es tan sólo para un par de millones de personas y en beneficio de grandes empresas en contra de la industria Pyme-, tal cual describen desde el Centro de Estudios de la Realidad Social y Política “Arturo Sampay”, requiere de "la conformación de un nuevo contrato y pacto democrático lejos de la teoría de amigo-enemigo que instaló el gobierno de Milei, eligiendo como enemigo al peronismo cuando, de verdad, por historia y por imperio de la realidad y por haber sido quien mejor desarrolló -en términos industriales- a la Argentina, quien más comprendió al trabajador y al humilde, es parte de la solución, al igual que debieran serlos aquellos radicales que abrevan del ideario de H. Yrigoyen, Illia y Alfonsín".