Kicillof en el Día de la Soberanía y tras la renuncia de Victoria Villarruel

Presidió el acto central realizado en el monumento que recuerda la batalla de Vuelta de Obligado, San Pedro. Fue la oportunidad para ratificar valores de patria y soberanía, y marcar las diferencia entre los dos modelos en pugna que vienen desde lo lejos de la historia nacional.

Al calor de un país inmerso en una seria degradación institucional y severa crisis económica salvo para aquellos que especulan en la rueda financiera, y con un presidente que oficializó la “renuncia” de la vicepresidenta al Poder Ejecutivo al confirmar que no es más parte del esquema oficial, el peronista Kicillof aprovechó el acto por el Día de la Soberanía, realizado el miércoles en San Pedro, para poner en consideración los dos modelos políticos que están en pugna.

Mientras el intolerante, agresivo y violento primer mandatario, sin manos legislativas y con la ayuda de radicales, del PRO, de la CC y algunos peronistas avanza en lo que denomina “destruir el Estado desde adentro” que no es ni más ni menos que una "destrucción planificada" que recae en la población, en el sector productivo nacional, en la educación y sobre la salud, el peronista Kiciloff cuestionó a “los vende patria que gobiernan”.

“Le digo a Milei: hay que proteger la producción nacional. Lo entiende Trump. Y acá nos quieren entregar de pies y manos”, explicó el gobernador. Y agregó: “da vergüenza la entrega del gobierno de Milei” y calificó al Presidente como “un figureti con ansias de llamar la atención”.

“Pocas veces se despreció tanto la soberanía nacional. Estamos frente al Paraná y no hay mejor lugar para hablar de la llamada a licitación que vienen amenazando con lanzar para la vía navegable troncal. Nuestra Constitución es clara: corresponde a las provincias el dominio originario de los recursos naturales existentes en su territorio. Milei no puede privatizar nuestro río y no puede darles la espalda a las provincias”, amplió Kicillof.

Además agregó: ”Estamos ante una época renovada de nacionalismos y nos toca tener un Gobierno nacional con un credo en el que sólo cree Milei. El Gobierno tendría que escuchar al pueblo que la está pasando mal y darse cuenta que lo que tiene que defender no es una ideología sino la producción, el trabajo y la soberanía nacional”.

Con el imponente monumento construido con cadenas recuperadas del fondo del río que fueron tendidas para frenar el avance de los invasores franceses, en lo que se conoció como la batalla de la Vuelta de Obligado, Axel Kicillof expresó: "fue acá donde un puñado de argentinos dieron una de las batallas probablemente más valiosas de nuestra historia. Las potencias habían bloqueado el puerto y decidieron dar el paso que estaban buscando: mandar sus barcos con productos para comercializar en las localidades y pueblos que había en la vera del Paraná. La intención era buscar lo que ellos llaman la ´libre navegación de los ríos´. ¿De qué libertad están hablando si era para saquear a los argentinos? Lo llamaban ´libres´ pero era para hacernos esclavos".