Internas del PJ: Julio Zamora abre fronteras, Moreira y Andreotti conservan la línea

Intuyendo que el electorado de Milei comienza a sentirse defraudado, peronistas como Cristina Fernández y Axel Kicillof, y el propio Sergio Massa, comienzan a salir a contener a su gente. En el medio quedan otras voces, otros dirigentes que no se sienten tratados.

Zamora junto a Schiaretti y Randazzo

Por: Tano Armaleo:- Al calor de una Argentina inmersa en una profunda crisis socio-económica, donde la pobreza no cede, al igual que la inflación, la desocupación, la caída de la producción y el consumo y los tarifazos no discriminan, en medio de este caos al cual llevó el país el intolerante, autoritario y agresivo presidente Milei, la oposición se reencuentra y reorganiza. En lo que se refiere a Unión por la Patria, cada sector, cada estructura política ha comenzado a mover sus piezas. Huelen graves heridas en el oficialismo. Intuyen que se abre una seria ventana para comenzar a recuperar terreno electoral. El primer paso es reencontrarse y reorganizar la tropa. Quienes más en claro tienen esto son los “descamisados”.

Así como Axel Kicillof atiende el día a día de la gobernación muy a pesar del daño que le intenta infligir el gobierno nacional negándole entregar fondos coparticipables y al mismo tiempo arma territorialidad con miras a una presidencial, Cristina Fernández acaba, de algún modo, de oficializar el inicio de una nueva construcción política que la tendrá en la centralidad en lo que respecta al armado de la estructura  política que vaya a cotejar con el modelo fundamentalista de Milei y sus socios del PRO y UCR.

Un tanto más distante de la interna del PJ, Sergio Massa, que continúa a pleno con reuniones de trabajo con empresarios y estructuras sociales y, además, se da lugar para la rosca con dirigentes como Cristina, Máximo Kirchner y Wado de Pedro, por caso, aguarda en boxes para oficializar su regreso al escenario político. No obstante, soldados del Frente Renovador han comenzado a ganar las calles con pintadas que rezan “Hay otro camino, Sergio Massa”. Otro más que como peronista huele la polvareda que comienza a levantarse en el horizonte, producto del malestar social generado a  partir de las políticas del gobierno nacional.

En el medio de este tire y afloje que asoma en el peronismo, con Cristina y Axel como principales actores, cada uno con su volumen, peso institucional y electoral, otros dirigentes buscan el sol de la mañana que les permita continuar la jornada aun cuando las fuerzas del cielo alteran el ambiente de manera negativa recreando la vieja y peligrosa teoría amigo-enemigo implementada durante la guerra fría.

En esta suerte de dos grandes carriles que presenta la provincia, el que atiende Cristina y el de La Cámpora en particular, y el de Kicillof, respectivamente, hay otras vías de contención y construcción política. Tal el caso de intendentes y exintendentes, y dirigentes que no se sienten contenidos en estos dos grandes espacios.

Así como un Guillermo Moreno se presenta, poco más, como el garante de la “recuperación ideológica del peronismo”, también existe un Fernando Gray (intendente de Almirante Brown) quien desde hace años viene cuestionando al presidente del PJ provincial, Máximo Kirchner, a quien le objeta, entre otras cuestiones, “entrar por la ventana”. La referencia viene a cuento de que el diputado nacional aterrizó en la presidencia a partir de un acuerdo entre dirigentes y no como la resultante de una elección interna. En tren de objeciones, algunos dirigentes y militantes colocan el acento en el senador Eduardo “Wado” de Pedro. Le cuestionan que “no se lo ve defender de manera concreta cuando Milei ataca a Axel y a las y los bonaerenses”.

En lo que respecta a la Zona Norte, el intendente Julio Zamora acaba de mostrarse junto a dos dirigentes con historial peronista, pero alejado de Unión por la Patria: el ex gobernador de Córdoba Juan Schiaretti, y el diputado y exministro de Transporte, Florencio Randazzo. Dos figuras que no son, eso se desprende del accionar político y legislativo, precisamente la contracara del modelo que representa Milei.

El peronista Zamora es de aquellos jefes comunales que no son o no quieren ser contenidos por estas dos grandes corrientes peronistas que atraviesan la provincia: La Cámpora y aquella que abreva de Axel Kicillof.  El jefe comunal de Tigre, tal vez, consciente de que tiene un electorado local más afecto al pensamiento individualista similar al que profesa el gobierno nacional debido, en gran parte, al desarrollo urbanístico de barrios cerrados, es de los que considera que el peronismo debe reformular un nuevo contrato social con la población comprendiendo y entendiendo los nuevos formatos sociales. Para Zamora es importante “tender puentes, ampliar los horizontes estrechos que existen hoy en nuestro espacio”, asegura. Y aclara que el encuentro con Schiaretti y Randazzo atiende a esta agenda consistente en dialogar con todo el mundo que entienda que el sentido de una patria socialmente justa es posible. Tambiem se pregunta si "hay alguien que pueda poner fronteras en mi relación con otros compañeros".

Los otros dos intendentes de la Zona Norte que tiene el  peronismo, Fernando Moreira en San Martín y Juan Andreotti en San Fernando, respectivamente, tienen cobertura nacional y provincial. En el caso de Moreira, de más está decir que conjuga el mismo verbo que el de Gabriel Katopodis, dirigente sobre el cual todas las miradas entienden resultaría el mejor candidato a gobernador para el 2027. Por su parte, el sanfernandino Juan Andreotti, su agenda político-electoral está referenciada en Sergio Massa.

Si algo tiene en manos por resolver el peronismo, UxP en su conjunto, es comprender que la población, el ciudadano de a pie, especialmente aquel que comienza a sentirse defraudado y agredido por el gobierno de Mili y sus socios del PRO y la UCR, necesita ser seducido y convencido a partir de una propuesta reparadora de la intolerancia y agresión, y daño estructural, que destila el oficialismo. Sumar nuevas voces, al PJ, a UxP son necesarias, vitalles. El punto es si estas voces vienen a silenciar o dejar de lado el sentimiento de una patria justa, libre y soberana. cm tod l que esto implica. El resto, como decía Perón, se acomoda en el andar.