El PJ de Vicente López, sorteando el debate, dijo “Sí, Cristina”
Cerró filas en torno a la precandidatura de Cristina Fernández como presidenta del partido.
Por: Miguel "Tano" Armaleo.- En medio de un calendario electoral que le exige al Partido Justicialista ordenarse en lo que respecta a la institucionalidad, y con una Cristina Fernández y Ricardo Quintela, respectivamente, que han manifestado la intención de presidir el partido, el PJ de Vicente López emitió un comunicado en respaldo de la dirigenta.
En el escrito, que extrañamente no lleva firma de autoridades, el PJ de Vicente López determina “adherir a la candidatura de la compañera CFK”. A modo de fundamentar el disciplinamiento aseguran que “hoy, más que nunca, necesitamos su experiencia y visión política para seguir construyendo un país donde cada voz sea escuchada y cada necesidad atendida”. Además, confían en la capacidad de conducción que tiene Cristina para unir a las distintas vertientes y corrientes que nutren al peronismo. Dicho esto mientras el gobernador Kicillof es objeto de algunos dardos por parte de la tropa más dura de la corriente La Cámpora
Lo que no dejó de llamar la atención en militantes como en afiliados, en cuanto al comunicado del PJ de VL, es que el mismo no pareciera ser el fruto de una trabajo de consenso, mucho menos de una decisión tomada en un plenario abierto, democrático y plural.
Si el peronismo, como principal estructura del espacio Unión por la Patria, tiene el mandato histórico, y el que le confiere la voluntad popular, de ser garante de recrear políticas, propuestas y proyectos que abran un horizonte esperanzador para millones de argentinos, en este contexto muchos se preguntan si esta metodología adoptada por el PJ de Vicente López contribuye a fortalecer lo que tanto insiste una líder del calibre de Cristina: ordenar el PJ, ser mejores, capacitarse, formarse, escuchar todas las voces.
Todo indica que conducir el PJ, pero sobre todo, dar impulso al movimiento nacional, exige, -es parte de los ADN peronistas- grandeza, generosidad, dejar de lado el sectarismo y correrse de lugares de confort.
En un país que se desgrana y mientras la crisis socio-económica sacude los hogares de una inmensa mayoría de la población, y el intolerante, autoritario y agresivo presidente parece gozar con estas políticas, la oposición, en particular el peronismo, comienza a organizarse. En el caso del PJ de Vicente López, lo hace diciendo “Sí, Cristina” ninguneando a otro precandidato que también tiene legítimas aspiraciones, Roberto Quintela, por caso. También el massismo plantea salir a la cancha su no hau lista de unidad
Todo indica que construir nuevas mayorías que permitan desplazar del poder al modelo neoliberal, requiere, tal cual sugiere el Centro de Estudios Arturo Sampay de Zona Norte, de la conformación de un nuevo contrato social-democrático que amplíe el horizonte electoral sobre la base de ejes claros como son una justa distribución de la riqueza, educación pública de calidad, reivindicación de la soberanía nacional, garantizar derechos allí donde la injusticia se hace presente, al igual que diseñar un modelo productivo nacional que tenga el aporte de la ciencia nacional, el esfuerzo de los trabajadores y a la inversión privada entonando la misma sintonía. Desde otro rincón, la agupación nacional La Marcha que tiene a Carlos Tomada como referente, también comulga con estos criterios.
Tal vez, y como acostrumbra a graficar un ex concejal y veterano dirigente de Vicente López que suele hace sentir su voz de tanguero en cuanta oportunidad se le presenta, “una cosa es la rebeldía peronista que Néstor habilitó en el 2003 e incluyó a millones de pibes en la militancia, y otra muy distinta ser irrespetuosos, se entiende”.
Si bien la candidatura de Cristina fue impulsada de manera oficial por La Cámpora, resta saber si en ella anida dejar de lado privilegiar a este importante sector para constituirse en la conductora de todas y todos los peronistas y, en lo posible, del movimiento nacional. Perón se caracterizó, entre otras cuestiones, por su generosidad y grandeza, en utilizar el nosotros antes que el yo. Siempre tendió brazos y puentes, siempre sumando, abriendo el juego, nunca renunciando a convicciones,
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