Barrio La Cava, historia de nunca acabar

A partir de un convenio firmado entre el Municipio (Gustavo Posse) y el Ministerio de Desarrollo Territorial y Hábitat (Fernanda Miño), se contempla la pavimentación, apertura de calles y la construcción de una estación de bombeo.

Por: Tano Armaleo.- Como si fuera un peldaño más de un largo e histórico camino iniciado hace cerca de 70 años que busca erradicar una realidad dramática -vivir en la pobreza producto de un sistema que expulsa y margina a millones de personas-, el Barrio La Cava vuelve a ser objeto de mejoras urbanas, sanitarias y sociales. Así surge del convenio firmado entre el intendente Gustavo Posse y Fernanda Miño Secretaria de Integración Socio Urbana de la Nación del el Ministerio de Desarrollo Territorial y Hábitat, responsable de urbanizar cerca de 4.000 barrios empobrecidos de toda la Argentina, e impulsora del mencionado convenio.

Tal cual se desprende del convenio, en el barrio de La Cava (nacido en los años 50 de la mano de muchas personas provenientes de distintos puntos del país que venían a poner sus manos para la construcción de la red de Obras Sanitarias de la Nación de Béccar), el gobierno nacional aportará los recursos económicos para la “pavimentación y apertura de calles, la construcción de una estación de bombeo, la red cloacal y de agua para un sector del barrio, nuevas luminarias y la remodelación de espacios públicos”, explicó Miño, ex concejal, vecina del barrio y reconocida y valorada militante social que no habla de pobreza y busca soluciones a para erradicarla desde un atril o de un confortable escritorio con la imagen de Evita en movimiento: con el poder que le confiere su Secretaría está generando cambios superlativos. Además, “se construirán nuevas viviendas en el barrio” confió el intendente Posse.

Gustavo Posse comentó: “Esta obra beneficiará la calidad de vida de unos 13.000 vecinos. Va a mejorar la infraestructura del lugar. No solo va haber nuevas viviendas, sino que además se van a abrir calles. Un compromiso muy fuerte de todas las áreas para que esto se pueda hacer realidad".

Entre las principales tareas se realizará la apertura y pavimentación de calles dentro del barrio en el perímetro que va desde Av. Andrés Rolón, Hudson, Intendente Neyer, Intendente Tomkinson, Riobamba y Jorge Newbery. Todas las calles que se abrirán contarán con servicios y la construcción de sus veredas.

Otra de las mejoras será la construcción de una red pluvial para mitigar las inundaciones. Constará de una estación de bombeo que incluirá cámaras de inspección y sumideros.

La participación de AySA, y de cooperativas de trabajo será el valor agregado y garante de que las obras cobren calidad.

De acuerdo con lo informado oficialmente, la obra tiene una duración estimada de 18 meses y se harán 453 conexiones para llevar el servicio de agua y cloacas a las familias del barrio. Habrá una “renovación del sistema hidráulico con la colocación de más de 2600 metros de cañería”. En una segunda etapa, “en un trabajo conjunto con AySA, se construirá una estación de bombeo cloacal” explicó Miño. “Además se construirán nuevas viviendas” aseguró el intendente.

Fernanda Miño, contó que “la intención es trabajar en las necesidades de los vecinos. Vamos a cambiar y mejorar la red vial, red peatonal, alumbrado, red de desagüe pluvial, red de agua y red de desagüe cloacal con conexiones domiciliarias para que no haya más inundaciones y mejoren su calidad de vida”.

Vale recordar que las últimas grandes obras llevadas adelante en el barrio fueron un plan de viviendas, cerca de 120 casas, encaradas durante el gobierno de Cristina Kirchner. Si bien las unidades no eran aquellas que históricamente supo construir el peronismo cuando de la mano de la justicia social daba vuelta verdaderamente la historia del país, por calidad, confort y dimensiones de las casas, lo valorable fue que más 120 familias mejoraron, en parte, la calidad de vida en materia urbana. Sin lugar a dudas, el verdadero desafío político seguirá siendo cambiar las reglas del mercado: la pobreza es la resultante, entre otras cuestiones, de que mientras unos acumulan, evaden impuestos, fugas capitales y endeuda al país, millones de personas terminan siendo víctimas de dicho modelo.