Barrio El Ceibo: el arte no se mezquina, las excepciones tampoco

La presencia municipal y el arte, junto a la voluntad de los y las vecinas, están convirtiendo a un barrio orillero en un paseo obligado a la hora de conocer la zona.

Por: Tano Armaleo.- Nació como una barriada para el cobijo de amantes de río, de la naturaleza y sobre todo,el poder tener un horizonte sin límites. El sólo hecho de estar a la vera del río y poder ver hasta donde la vista logre transportar la imaginación “navegando” turbias aguas del Plata, eso, de por sí, ya era un privilegio; lo sigue siendo. De este modo, algunos fueron ocupando espacios y levantando casas muy ribereñas, precarias por cierto. Así comenzaba a tejerse la historia, en las inmediaciones de los 60, de lo que muchos llamaban el Barrio chino; Bermúdez y la costa del Río de la Plata, La Lucila. El viejo tren del Mitre había pasado a la historia; Frondizzi lo desactivó en 1961.

Pasaron varias décadas, y la necesidad de tener el acceso a una vivienda digna hizo que muchas personas vieran, en esas tierras costeras, una posibilidad concreta de plasmar un sueño posible. De este modo, y tras varias décadas de lucha y trabajo solidario, el barrio, desde hace muchos años bautizado como El Ceibo, logró echar raíces. Ya no es aquel que naciera al amparo de la precariedad. Mejoró en todos los aspectos urbanos que uno pueda imaginar. Aun cuando todavía resta materializar temas de infraestructura urbana, aquella postal de la precariedad y olvido quedó atrás. Si bien los y las vecinas aguardan que la provincia le otorgue la regularización dominial, cierto es que durante los últimos años la acción municipal marco una impronta de calidad en lo que respecta a embellecimiento. Si el desafío era sumar a El Ceibo como un barrio más, indudablemente, el compromiso barrial, sumado al trabajo oficial, pareciera estar dando sus frutos.

Con sólo ingresar a estrechas callecitas, que no distan de otras imágenes que bien podrían ser rescatadas de otros confines del planeta, ver una coqueta plaza y un camino costero que asoma al río y se integra con la Reserva Ecológica, no es complejo imaginar que aquel sueño de la vivienda digna está cada día más cerca de cerrarse. Además, el barrio cuenta con un Centro de Integración para la Niñez.

Seguramente, el sueño de la vivienda propia cerrará, como dice el veterano vecino Pepe, “cuando tengamos los papeles en regla”.

En el mientras tanto, el municipio, a instancias de la concejal Soledad Martínez al frente del área social, junto con el trabajo del subdelegado municipal de La Lucila Miguel Esaldi, han puesto en marcha una interesante política artística -además de la social-en torno al barrio. La misma consiste en embellecer los accesos con imponente trabajos de mosaiquismo, una suerte de arte bizantino muy típico, por caso, de ciudades como Venecia, Italia. Bastarán un par de barcitos, y cartón lleno, paseo obligado si de verdad se quiere conocer el "sentimiento costero".

Al respecto, por estas horas, las reconocidas artista y especialista en mosaiquismo, Estela Blanchar y Cris Lanuke, están poniendo más arte en uno de los ingreso al barrio, en de la calle Bermúdez. Convocadas por el municipio, el trabajo de las artistas consiste en estampar sendos diseños que representan las raíces de un árbol como el ceibo, de raíces extensas, abrazadoras, y contundentes. No muy distinto a la pasión que hoy tiene cada uno y una de las vecinas de El Ceibo.

Mientras esto se sella, en La Lucila, en otro extremo de Vicente López, en el barrio Golf de Olivos y en las inmediaciones de la estación Olivos, barrio La Isla, las quejas por Ordenanzas de Excepción (una práctica que estaba adormecida) en beneficio de grandes empresas constructoras comienza a esmerilar al blindado Jorge Macri. La otra queja proviene por el cobro del ABL, “los que más tienen, menos paga, 5%, promedio, cuando el que menos tiene pagará, en el 2021, una cifra cercana al 40%”, es lo que se denuncia desde el bloque del PJ-Frente de Todos que intenta conducir Fabián “Toro” Ruíz. Al aumento del ABL, en cuanto a iniquidad se refieres, fue expresado, por separado, por la concejal Marcela Cortellias y su par Joaquín Noya, respectivamente.