Fuerte aceptación popular por congelamiento de tarifas en internet, TV por cable y celulares
El presidente, en medio de la pandemia, congeló tarifas hasta diciembre y definió como servicios esenciales a dichas prestaciones. Juntos por el Cambio volvió parce en la vereda de los empresarios
Foto ilustrativa
Luego de que el presidente Alberto Fernández volviera poner a la telefonía móvil, a la TV por cable e internet, respectivamente, como servicios esenciales y congelara las tarifas hasta fin de año, las reacciones no se hicieron esperas. Mientras la oposición, especialmente aquella enrolada en Juntos por el Cambio, mostró de qué lado de la vida se para a la hora de construir política, un amplio sector de la población expresó satisfacción por la medida presidencia.
Un reciente relevamiento acaba de revelar que cerca del 65% de la población, al momento de ser consultada si estaba de acuerdo con el congelamiento de las tarifas, dijo estar de acuerdo con lo dispuesto por el gobierno nacional.
Una vez conocido el decreto presidencial, que viene a derogar aquel firmando por Mauricio Macri en el 2015, a los pocos días de asumir –artículo 15 de la Ley Argentina Digital, que establecía que las telcos y tics eran servicios esenciales “en competencia”, y que el Estado tenía la facultad de autorizar aumentos-, Juntos por el Cambio, a través de voces como las de Patricia Bullrich, Gabriela Giudicce, Mario Negri, Ernesto Sanz, Elisa Carrió, cuestionaron el decreto que congela tarifas y la esencialidad del servicio por considerarlo “un avance sobre el interés privado y el control informativo”. De este modo, Juntos por el Cambio -a pedido de las cuatros empresa que controlan el mercado-, vuelve a abonar, al igual que los tarifazos del 3.000% en materia de servicios impuesta por Mauricio Macri, que las empresas abusen de las posiciones oligopólicas y dominante que tienen en el país.
Cabe mencionar que países como Canadá, Holanda, Francia, México han declarado a los servicios mencionados como esenciales. Por su parte, el Chile de Sebastián Piñera se apresta sancionar la misma medida que hoy impulsa el gobierno nacional y que llevará al seno del Congreso para la correspondiente sanción.
De este modo así como ocurre en las eléctricas, gas y agua o el transporte que ingresan en la categoría de esenciales, lo propio se fija en con las telefonías por celular y la TV por cable. Esto nada tiene que ver con fijar contenidos, mucho menos controlar las empresas. Sólo procura defender al usuario evitando que las empresas utilicen cuadros tarifarios abusivos. Pero sobre todo que, así como lo han entendido los canadienses, franceses y mejicanos, por caso, la población tenga un acceso garantizada a un servicio que ha sido declarado por la ONU dentro de la Categoría de Derechos Humanos. Y, además, que las empresas no sometan a la población a una limitación que hoy, en plena pandemia, se nota claramente la importancia en declararlo esencial.
El gobierno de Larreta asegura que cerca de 5.000 alumnos de la Ciudad no tienen acceso a conectividad. Así como el gobierno (CABA) no garantiza, a esos alumnos, calidad educativa, mucho menos lo harán las empresas. Y menos aún si las tarifas son el producto del libre juego que pretende fijar el mercado ante un Estado defendiendo, exclusivamente, el interés empresarial.