Domingo de irresponsables e irrespetuosos
Cientos y miles de personas ganaron calles y espacios públicos, en gran proporción, sin tomar medidas sanitarias contra el COVID. Los municipios se aprestan a fijar pautas claras para las salidas recreativas
Saturados, cansados, fastidiados y agotados por una pandemia que sacude y promete seguir acompañándonos por largo tiempo -bastaría ver el mundo-, la jornada de ayer fue claramente atípica. La invasión de cientos y miles de personas que salieron a caminar y pasar una bella jornada en espacios públicos, no se compadece con la responsabilidad social que la pandemia amerita. Mientras esto sucedía, el país registraba 4.231 contagiados por COVID, 26 fallecidos, y una ocupación de camas del 65% en el AMBA y nivel país 54,6 %. A la fecha, se registran 126.755 contagios y 2.260 fallecidos.
Mientras esto acontecía, plazas y paseos públicos fueron cubierto por cientos y miles de familias como quienes buscan un layo de luz en medio de la oscuridad más temida. Es lo que uno podría suponer. Sin embargo, el temor y la prudencia que debiera reinar a la hora de recuperar cierta normalidad, no fue tal. [if !supportLineBreakNewLine]En tanto, intendentes de la región se aprestan a sellar un acuerdo en conjunto para elaborar un protocolo de salidas recreativas. Será, así lo detalló el intendente Julio Zamora (Tigre) cumpliendo los protocolos nacionales y manteniendo el distanciamiento social del caso[endif]
La zona costera, fue “tomada” por infinidades de autos y personas que violando toda recomendación terminó dando rienda suelta a un domingo demasiado distendido. Con solo observa, por ejemplo, que la costa de San Isidro los estacionamientos estaban prácticamente cubiertos revele el grado de irresponsabilidad de esas personas. Un dato no menor es que el sitio se encuentra cercado mediante una cinta colocada por la municipalidad de San Isidro. Poco y nada pareció importa dicha prohibición, la gente la rompió a fin de poder estacionar. Otra imagen de irresponsabilidad social la dieron aquellos que caminaba sin barbijos; niños incluidos
Se podría entender el “desboque” y afán de la gente en tomarse un respiro en medio de las pautas que impone la pandemia, empero, lo incomprensible continúa siendo la falta de respeto. No cuidarse y no cuidar al otro. Es en este punto en que toma fuerza lo de cuarentena intermitente que planteo, el viernes, el gobernador Kicillof. Traducido: su la irresponsabilidad e imprudencia le gana a la razón y respeto, volver a fases más estricta terminará siendo la impronta. Nada distinto a lo que está sucediendo en otros países, apertura y cierres de actividades.