Si no son delincuentes le pegan en el poste
Un documento firmado por Macri y miembros del PRO, cusan al gobierno, entre otras cosas, por la cuarentena. No quieren Estado, más mercado
Por Tano Armaleo.- Si no son delincuentes le pegan en el poste. En medio de la pandemia cuando la parca no reconoce credo ni sexos, tampoco ideologías, y la crisis sacude de manera durísima, estos individuos siguen lucrando y especulando. Solo buscan lucrar, y sacar ventaja de cualquier tipo. Son rostros miserables que afortunadamente asoman con mayor nitidez en tiempos de cuarentena, lo que esto permite que el individuo de a pie los pueda identificar. Allí están apretando, extorsionando y manipulando, vía medios de comunicación, al gobierno nacional y a cuanto gobernador o dirigente político o autoridad sanitaria salga argumentar lo relevante que es seguir aplicando la cuarentena. Argumento basado en análisis científico, no aquellos que quieren imponer los mercados.
Mientras la política prioriza la salud, sin descuidar el aspecto económico inyectando dinero sobre la población y acompañando al sector productivo (cercad de 700.000 millones de pesos está destinado el Estado), los mercados (Techint, Grupo Clarín, Vilas, bonistas y acreedores por mencionar uno pocos) y sus empleados fustigan al gobierno por las medidas. No quieren cuarentena, mucho menos que la política sea parte activa de la realidad nacional. No les importaría pagar ese 2% de impuesto para bimillonarios que se está discutiendo por estas horas, siempre y cuando el Estado se apare de las decisiones.
No es casual que radicales como dicen ser los diputados Mario Negri, Rodolfo Cornejo, Luis Juez, al igual que los macristas Cristian Ritondo, Alberto González Patricia Bullrich ahora digan que el Congreso debe estar abierto para sesionar, cuando hace un mes decían lo contrario. De boludos no tienen nada. Juegan a la mancha de noche y con tapaboca y ojos. Responde a interese, sólo que no lo dice. No sería cuestionable cómo podrían votar ante un impuesto como el señalado. En problema de esta caterva de legisladores es que responden, reiteramos, a los mercados. Ni más ni menos lo que hizo el gobierno de Mauricio Macri (Cambiemos).
Y hablando de Mauricio Macri, y de los miserables. Vale la pena rescatar lo que acaba de publicar el portal El Destape. De acuerdo con la información rescatada por el medio, el ex presidente firmó un documento donde critica al gobierno nacional y afirma que “avanza el populismo por la pandemia del coronavirus”. Junto a Mauricio Macri, ese documento lo firman, entre otros, el economista ultraliberal, Roberto Cachanosky, el empresario Alejandro Roemmers, la ex ministra de Seguridad Patricia Bullrich, el negacionista Darío Lopérfido y el “escritor” Marcos Aguinis. Es un texto impulsado por la derecha iberoamericana liderada por Macri y Mario Vargas Llosa, integrantes de grupo FIL (Fundación Internacional para la Libertad). Se titula "Que la pandemia no sea un pretexto para el autoritarismo".
"En España y la Argentina dirigentes con un marcado sesgo ideológico pretenden utilizar las duras circunstancias para acaparar prerrogativas políticas y económicas que en otro contexto la ciudadanía rechazaría resueltamente. En México arrecia la presión contra la empresa privada y se utiliza el Grupo de Puebla para atacar a los gobiernos de signo distinto. A ambos lados del Atlántico resurgen el estatismo, el intervencionismo y el populismo con un ímpetu que hace pensar en un cambio de modelo alejado de la democracia liberal y la economía de mercado", dice parte del escrito. “Mientras –argumentan los firmanes- los empleados de la sanidad pública y privada combaten el coronavirus valerosamente, muchos gobiernos toman medidas que restringen indefinidamente libertades y derechos básicos. En lugar de algunas entendibles restricciones a la libertad, en varios países impera un confinamiento con mínimas excepciones, la imposibilidad de trabajar y producir, y la manipulación informativa".
Siempre en tren de miserables, es el turno del ex presidente del Banco Nación, Javier González Fraga. El muy pícaro sigue cobrando un sueldo en representación del Estado a pesar de que hace cuatro meses dejó su cargo en la entidad. Embolsa unos 80 mil dólares al año, cerca de 5,5 millones de pesos al tipo de cambio oficial en este momento, como miembro del directorio del Banco Latinoamericano de Exportaciones (Bladex). Fue presidente del banco nación al mismo tiempo que del organismo mencionado; cobraba en las dos ventanillas.
Fraga, a diferencia de Carlos Melconian o Juan Carlos Fábrega que cuando estuvieron en su misma situación donaron el sueldo a la Fundación banco nación, él se la metió en el bolsillo.