Sigue la polémica por el "cierre temporario" de Club Teléfonos
Mirada de socios
Una reciente nota referida al “cierre temporario” del Club Teléfonos de Vicente López, tal cual describía ante Lo Nuestro Oscar Ruggero Secretario Gra. del FOETRA que representa a los telefónicos, despertó “indignidad” entre socios y profesores que prestaban servicios en la tradicional institución. Cabe recordar que el Club cerró sus puertas recientemente. Desde el gremio, confiaron que el mismo se debe a una “etapa de refacciones y recuperó de estructuras” que implican serios riesgos para la gente -ampliar nota en: El club Teléfonos no cierra, en dos años se reabre. Sin embargo, las dudas quedaron sobre el terreno. El temor de que allí el municipio otorgue alguna excepción y así poder levantar torres, previa venta de terrenos alienta el malestar. Desde el Concejo Deliberante, y en particular del Bloque del PJ-Frente de Todos del cual abreva Ruggero, no se conoce que se hayan expedido al respecto sobre el tema. Sólo se escucho a la concejal Sofía Vanelli (FdT) expresando sus “dudas” por el “cierre temporario” que augura el gremio.
Erigida como una suerte vocera de socios, vecinas, y profesoras, Myriam Ruiz Díaz dijo que luego de leer la nota en Lo Nuestro “me siento indignada por los argumentos mentirosos del Secretario de FOETRA (Ruggero)”. Y al respecto, explica su versión: fuí participe de la sub-comisión de básquet masculino que creamos los padres para mantener esta actividad. Esta gente fue haciendo un vaciamiento del club en etapas. Fueron echando a los concesionarios y a diferentes actividades. Solo quedamos hasta el final los que pusimos el cuerpo y dimos lucha. Desde el 2017 que echaron a básquet femenino, los padres mantuvimos los gastos de arbitraje de todas las categorías; esto representaba alrededor de $12.000/$15.000 pesos por mes. En marzo del 2019 arreglamos ediliciamente la cancha principal y hasta la pintamos, desde hace más de tres años compramos los materiales e uniformes de los chicos con rifas, publicidades, buffet y hasta el armado de eventos deportivos”.
“Le aclaro -confía Díaz- que desde las distintas disciplinas del club tuvimos una reunión con Jorge Marcri y Fabián Turnes (director de deportes del municipio) entre otras personas, que representan los distintos sectores”, y no deja pasar la oportunidad para recordar que “después de nuestra reunión y abrir los ojos al municipio de lo que estaba pasando, de repente el Consejo Deliberante condonó la deuda de ABL que tenía el club y casualmente fue impulsado por el bloque oficialista”. Y le factura al intendente Jorge Macri lo siguiente: cuando fuimos con el planteo nos dijo "tendrémos una reunión con esta gente (la del club) para que entiendan qué se puede hacer y qué no, pero mientras tanto no le condonaremos la deuda de ABL para que entiendan que al Club les sale más caro cerrado que abierto"”. A las pocas semanas, el Consejo Deliberante condonó la deuda, nada distinto a lo que sucede con otras instituciones. Sólo que en este caso, los vecinos parecen no conocer la dinámica municipal y la discrecionalidad con la que se maneja el jefe comunal a la hora de impartir excepciones, especialmente hacia grandes constructoras.
Finalmente, Myriam Ruíz Díaz apelando a cuestiones afectivas, como debe ser cuando uno es parte de un proyecto colectivo y solidario como resulta ser un club, dice: me gustaría que entiendan que mi dolor y el de más de 200 familias es que nuestros hijos perdieron su segunda casa, las lágrimas que vimos de chicos desde los 5 años, adolescentes y hasta los de más de 30 años, jugadores de primera arraigados desde la infancia nos partieron el alma y más aún, indignaron cuando no nos daban respuestas”.