“Estamos ante la Venezuela de Macri”
Violenta represión sobre militantes sociales
La despiadada violencia policial desatada sobre distintas organizaciones sociales que se habían movilizado esta tarde sobre la avenida 9 de Julio, a la altura de Belgrano, en busca de un diálogo con la Ministra de Desarrollo social, Carolina Stanley, despertó el malestar de amplios sectores políticos. Balas de goma, carros hidrantes, palos, y gases lacrimógenos fueron utilizadas por la fuerza policial para “despejar” el corte y acampe que venían sosteniendo los manifestantes. Hubo heridos y detenidos.
El reclamo social incluyó la instalación de carpas y ollas populares sobre los carriles del de colectivos ( Metrobus) frente a la sede del Ministerio de Desarrollo Social, lo que motivó la intervención de las fuerzas de seguridad. Entre los manifestantes había más de 20 agrupaciones, entre las que estaban Quebracho, la Federación de Trabajadores por la Economía Social Limitada (Fetraes) y el Frente por Trabajo y Dignidad Milagro Sala.
Las organizaciones política que cortaban la avenida exigían al Gobierno "un plan de obra pública cooperativa y la declaración de la emergencia alimentaria”, además de la “emergencia tarifaria en fábricas recuperadas, clubes de barrio y comedores comunitarios”.
La incapacidad oficial, sumada a la dureza de las organizaciones movilizadas, impidió descomprimir la situación desde la sensatez y respeto mutuo. El cambio que época vienen con represión y dureza ante todo tipo de reclamo social tal cual se viene observando. Al igual que sucede en otros puntos del planeta, el gobierno se muestra dispuesto a reprimir con despiadada dureza, antes que persuadir o agotar todas las instancias institucionales y democráticas. “En Venezuela hay una derecha golpista y violenta que sale a las calles para derrotar al gobierno, acá, Macri saca a la policía para reprimir la protesta social, son incorregibles”, comentaba ante Lo Nuestro, el concejal sanisidrense Juan Ottavis quien se encontraba circunstancialmente en las inmediaciones -estaba en la Junta Electoral del PJ-. “Uno puede entender que un corte puede causar malestar, es cierto, pero eso no da derecho a semejante represión”, sentenció el dirigente quien tiene una militancia cercana a la doctrina social de la iglesia